Anécdotas, recuerdos y poemas, enmarcan 40 Aniversario Luctuoso José María Bastar Sasso

Anécdotas, recuerdos y poemas, se hicieron presentes en el homenaje con motivo del 40 Aniversario Luctuoso de José María Bastar Sasso (1983-2023), realizado en el marco de los Festejos Juaristas, con sede en el auditorio “Lic. Manuel Sánchez Mármol”, del Instituto Juárez.

Ante el representante del rector de la UJAT, Guillermo Narváez Osorio, el secretario de Servicios Académicos, Luis Manuel Hernández Govea, el director de Difusión Cultural, Miguel Ángel Ruiz Magdonel, agradeció la participación del nieto de Bastar Sasso, Tenoch Bastar Ocampo, la directora de la División Académica de Ciencias Sociales y Humanidades, Felipa Sánchez Pérez, así como del historiador Jorge Priego Martínez.

En un inicio, Felipa Sánchez Pérez, refirió que “cuando hablamos de Tabasco, de periodismo, de poetas, del esfuerzo constante y la lealtad a uno mismo, siempre debemos recordar la figura de José María Bastar Sasso, quien fue poeta, campesino, teniente, periodista, músico y redactor. Un nacionalista, hombre disciplinado, hombre universal, amante de la cultura y del arte”.

Le siguió la lectura del poema “Soy tabasqueño”, por la joven premio municipal de la Juventud 2022, Karen de la Torre Pérez, para dar paso a la intervención de Jorge Priego Martínez, quien destacó que a don “Chema” como cariñosamente le llaman los amigos y conocidos, se le conoce como el poeta de Tabasco, por la serie de poemas costumbristas que publicó principalmente durante su juventud.

Luego de recordar que tuvo la fortuna de recibir como obsequio personal los libros “Estival” y “Hojarasca”, consideró que Bastar Sasso no puede encasillarse como el poeta popular cuyas bombas, cantares y poemas de ambiente campirano merecieron el aplauso en la época Garridista, debido a que en su obra juvenil, también predomina y fuertemente la nota plena de erotismo.

Se dio paso a la lectura del poema “Mi musa” por el joven estudiante Leonardo Olvera Mendoza, y para cerrar el homenaje Tenoch Bastar Ocampo, recordó anécdotas y las vivencias de su infancia en la casa de su abuelo “Chema”, quien en aquella época se desempeñaba como director de la biblioteca del estado “lo recuerdo como un hombre alto, altivo, de recio carácter, pero a la vez noble”.

-15-03-23/GAPM