Investigador de la UNAM destaca potencial medicinal de los árboles tropicales en “Sabor a Ciencia”

Las selvas del sureste mexicano son ecosistemas poco explorados, cuyos especímenes arbóreos pueden utilizarse para desarrollar medicamentos antivirales; como ejemplo, el árbol llamado popularmente “Barí”, “Palo de María” o “Cedro cimarrón” contiene sustancias capaces de inhibir la enzima del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH).

Así lo destacó el investigador adscrito al Instituto de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Ricardo Reyes Chilpa, al impartir el tema “Árboles contra los virus VIH y SARS-COV-2” en el programa de Radio UJAT “Sabor a Ciencia”.

Al compartir su experiencia en el estudio de árboles tropicales, destacó que algunos ejemplares del género arbóreo “Calophyllum” contienen propiedades químicas útiles para contrarrestar la encima transcriptasa reversa del VIH, la cual es la principal causante del SIDA.

Los ecosistemas tropicales de entidades como Tabasco, Chiapas y Veracruz, dijo, albergan el árbol “Calophyllum brasiliense”, mejor conocido entre la población como “Barí”, cuyas hojas contienen las propiedades químicas necesarias para elaborar fitoterapéuticos, es decir, alternativas botánicas que prevengan, alivien o curen enfermedades.

Asimismo, compartió avances preliminares de sus investigaciones actuales, en las que estas mismas sustancias han mostrado actividad contra el virus SARS-COV-2, responsable del COVID-19, lo que abre nuevas posibilidades para el desarrollo de antivirales derivados de plantas tropicales.

Reconoció el valor de los árboles como “fuentes sostenibles de compuestos medicinales”, los cuales, en lugar de ser talados, pueden ser objeto de desarrollo para un esquema de cultivo, donde se recolecten únicamente las hojas: garantizando un suministro continuo de materia prima sin afectar la integridad del ecosistema.

Aseguró que, de emplearse esta iniciativa, además de los beneficios para la salud de los pacientes con SIDA; se registrarían beneficios de corte ambiental y social, ya que la siembra de árboles, así como su respectiva cosecha, requerirán mano de obra humana, lo que generaría nuevas oportunidades de empleo en el mercado.

Al cerrar su intervención, invitó a los radioescuchas a valorar la riqueza biológica del Estado, ya que el “mal monte” constituye, en muchas ocasiones, un reservorio invaluable para el futuro de la medicina tradicional.

Cabe destacar que, Ricardo Reyes Chilpa es doctor en Ciencias por la UNAM; es autor y coautor de 128 artículos científicos y es investigador nivel III en el Sistema Nacional de Investigadoras e Investigadores.


24-11-2025 /ADS